Si nos preguntasen como definiríamos Nueva Zelanda en una sola palabra, la respuesta sería espectacular. Playas paradisíacas, montañas siempre nevadas, lagos de un azul increíble, volcanes, glaciares y fauna en estado salvaje son algunos de los muchos atractivos de este país en las antípodas.
Con un tamaño similar a la mitad de España pero con una décima parte de habitantes, Nueva Zelanda es un país muy fácil de visitar, totalmente enfocado al turismo y donde la gente está siempre dispuesta a ayudar.
En Internet podemos encontrar muchísima información para preparar nuestro viaje pero una vez allí nos resultará igual de fácil gracias a los i-sites, que son centros de información turística donde encontraremos información de todas las actividades, podremos buscar alojamiento y hasta reservar excursiones para cualquier punto del país, todo de forma gratuita.
Son como las oficinas de información turística de cualquier ciudad pero en nuestra opinión, mucho más completas. Todas las personas que trabajan en los i-sites son expertos locales que nos ayudarán a planificar itinerarios, a reservar un alojamiento que se ajuste a nuestras necesidades y a solucionar cualquier imprevisto que nos pueda surgir, convirtiendo nuestro viaje en la mejor experiencia posible. También nos informarán del pronóstico del tiempo y de las condiciones para realizar trekkings o rutas de montaña.
Hay más de 90 oficinas entre las dos islas y siempre están muy bien señalizadas, por lo que no tendremos ningún problema para encontrarlas. En todas ellas hay una selección muy extensa de mapas gratuitos, guías informativas y folletos. La mayoría además cuenta con servicios, tienda de souvenirs y teléfono, y en algunas hasta podremos conectarnos a Internet.
Basándonos en nuestra experiencia personal, podemos decir que nos resultaron súper útiles, lo primero que hacíamos cuando llegábamos a un nuevo lugar era buscar el i-site. Nos ayudaron a buscar alternativas cuando el mal tiempo nos obligó a cancelar un trekking que teníamos planeado, nos recomendaron excursiones que reservamos con ellos mismos y siempre estaban dispuestos a ayudarnos con las numerosas dudas que teníamos, y lo mejor de todo: ¡con una sonrisa!
El único pero que les encontramos fue el horario. Por la tarde solían cerrar bastante pronto, entre las 4 y las 5, por lo que en alguna ocasión al llegar a nuestro destino, ya estaba cerrado. Hay que decir que también abren bastante pronto por la mañana, así que lo dejábamos para la primera hora del día siguiente.
Si queréis más información, ésta es la página web de los i-sites, donde encontrar información de los diferentes centros que tienen y podremos ponernos en contacto con ellos mediante email o teléfono. Pinchando aquí podéis descargaros un mapa con todas las oficinas y sus direcciones.
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