Lleva casi 700 años en pie. Sobrevivió a un devastador terremoto en 1509. Fue cárcel para los prisioneros de la ciudad. Acogió uno de los primeros observatorios astronómicos del mundo. Se dice que el primer humano de la Historia que voló se tiró desde su parte superior en el siglo XVII (el científico Hezârfen Ahmed Çelebi, recorriendo más de 3500 metros con unas alas de madera).
Solamente cuesta 10 liras turcas (poco más de 4 euros), y desde arriba tenemos unas de las mejores vistas de Estambul, del Cuerno de Oro y de la parte asiática, tal y como puedes ver en la galería de fotos de la parte inferior de este post. Merece la pena si subes por la tarde a última hora, porque presenciarás una magnífica puesta de Sol, aunque debes tener cuidado porque si el mirador (bastante estrecho) está saturado en esta hora punta la experiencia no puede ser todo lo agradable que deseas.
Para acceder a la Torre Gálata tienes dos opciones. La primera es coger el funicular-metro que une el puente de Gálata (en la parte inferior de la ciudad, junto al Cuerno de Oro) con el barrio de Beyoğlu-Pera, donde está situada la Torre. Este medio de transporte fue uno de los primeros trenes subterráneos del planeta. La segunda es subir andando al barrio de Beyoğlu-Pera desde la plaza Taksim, recorriendo primero una de las zona más comerciales de Estambul, y posteriormente llegar a los pies de la Torre paseando por las calles de este peculiar barrio.
[portfolio_slideshow exclude=»4″]